Magia en cada taza: la historia “encantada” de Finca Jerusalén

En el corazón de Trinidad Santa Bárbara, Honduras, se encuentra Finca Jerusalén, una finca cafetalera “encantada” que no solo cultiva granos excepcionales, sino también preserva un legado que se remonta a principios del siglo XX. José Cuellar su propietario, nos cuenta con agrado la mágica historia de esta increible finca: Todo comenzó con mis bisabuelos, Liberato Fajardo y Vicenta Sabillón, quienes, con un profundo amor por la tierra, iniciaron el cultivo de café en pequeñas parcelas.


Este sueño fue heredado por mis abuelos, José Salomón Fajardo Sabillón y Adriana Bueso Paredes, quienes le dieron un giro comercial al negocio fundando, en 1949, la empresa “Tienda y Bodega La Confianza”. Esta empresa fue pionera en su época, estableciendo relaciones comerciales con grandes nombres como H de Sola en El Salvador y el Beneficio Chimizales en Honduras.



Con el deseo de preservar este legado familiar y adaptarlo a los nuevos tiempos, en octubre de 2010 fundé Inversiones Jerusalén. Lo que comenzó como un modesto centro de acopio y comercialización de café, ha crecido hasta convertirse en un referente de calidad y solidez financiera en la región. Nuestro crecimiento continuó en 2019 con la creación de APROCAJER, una asociación que impulsa una estructura organizativa para fortalecer a los productores y proyectar el café hondureño al mundo.


Una vida dedicada al café

José Francisco Cuellar Fajardo, oriundo de Trinidad, Santa Bárbara y propietario de Finca Jerusalen menciona que: Finca Jerusalén no es solo un negocio, es un pedazo de historia viva que representa la pasión y el esfuerzo de generaciones. Hemos sido pioneros en la promoción del café de Honduras a nivel internacional. Un ejemplo de ello es el proyecto “Coffee Fest Honduras”, que organiza eventos exclusivos para presentar los mejores granos hondureños a consumidores de todo el mundo.

“Mi historia está íntimamente ligada a la caficultura. Como cuarta generación de productores, comercializadores y exportadores, he dedicado mi vida a honrar el trabajo de mis ancestros mientras busco nuevas formas de innovar y expandir nuestro negocio”.


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Más allá del café

En Finca Jerusalén, creemos que el café es mucho más que una bebida. Es una experiencia, una tradición y un medio para conectar culturas. Cada grano que cultivamos lleva consigo la historia de nuestra familia, el amor por nuestra tierra y la fé en el futuro.


Invitamos a todos a ser parte de esta historia, a saborear la pasión que ponemos en cada taza y a descubrir el corazón de Honduras a través de nuestro café. Porque para nosotros, el café no es solo un negocio, es una misión y un legado que estamos orgullosos de compartir con el mundo.

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